El autobús

Theodoro entró en el autobús, se sentó y luego se dio cuenta. "¿Por qué no hay nadie más en este autobús aparte de usted y yo, conductor?" El conductor sonrió: "Porque el turno apenas está comenzando", dijo el conductor, bajando una palanca, y la puerta se cierra y el autobús comienza a moverse por la carretera.

Theodoro se pasa gel por el cabello, el conductor pregunta: "¿Arreglándote el cabello? ¿Por casualidad vas a ver a una chica?" Theodoro sonríe, "Sí, es muy guapa, tiene más curvas que esta calle por donde estamos pasando." El conductor abre los ojos sorprendido, "Vaya, eres un tipo con suerte." Theodoro se ríe mientras se peina el cabello hacia atrás, "Ahahah, pero está casada, ¿a quién le importa, verdad?" El conductor hace una mueca de asombro, "Chico con suerte, ¿cuál es su nombre?" Theodoro cruza las piernas, "Elizabeth. ¿No es un nombre hermoso?" El conductor señala un asiento en el autobús, "Puedes sentarte allí, está más cerca de mí, así podemos hablar sin tener que gritar." Theodoro obedece y se sienta donde el conductor indica, el conductor sonríe, "¿No tienes miedo de salir con mujeres casadas?"

Theodoro mira por la ventana, "Por supuesto que no, su esposo es un cobarde, no merece a la mujer que tiene. ¿Puedes creer que el idiota es tan estúpido que hoy su esposa me envió un mensaje para que pagara este autobús y la encontrara en el motel cerca de la carretera?" El conductor pregunta, "¿Hoy a las 180?" Theodoro se sorprende, "Sí, ¿cómo lo sabes?" El conductor no responde, pero Theodoro nota que el autobús pasa de largo por las paradas y no se detiene. Theodoro pregunta, "¿Por qué no se detiene en las paradas?"

El conductor detiene el autobús en una bajada, se acerca a Theodoro y dice: "Este será tu fin, no intentes levantarte, porque si lo haces, la bomba que coloqué debajo de tu asiento explotará." Theodoro comienza a sudar, "¿Qué quieres decir? ¿Por qué hiciste esto?" El conductor suelta el freno y el autobús comienza a descender la bajada lentamente, el conductor salta del autobús y Theodoro entra en pánico, "Eh, vuelve aquí, ¿qué estás haciendo? ¡Detén este autobús!" El autobús comienza a ganar velocidad mientras desciende la bajada, Theodoro junta las palmas de las manos y reza: "Dios, perdono mis pecados...", antes de que termine, el autobús choca de frente contra un muro y él muere.

El conductor, viendo el accidente, sonrió y dijo: "No fue mi esposa quien te envió el mensaje, fui yo. Quería que tomaras este autobús para poder matarte, maldito. Ahora ustedes están juntos en el infierno."

En la casa del conductor, su esposa fue encontrada muerta, tendida en la cama con dos disparos en la cabeza. La venganza por la traición fue completa.