41 w ·Translate

Cada día es un regalo de Dios, mientras pueda ver el y mientras pueda limpiar mi cuerpo con mis propias manos manos no tengo derecho de quejarme. Y el día que no pueda, tampoco tendré derecho a quejarme porque debo asumir todos los retos que me presente Dios o los que se me presentan en la vida como respuesta a mi actuación.
Nada ocurre de la nada, todo tiene su causa